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Las asesinas de olivos: dos enfermedades amenazan con destruir la producción olivícola del mundo

Fotos: El País, El Mundo y  El Confidencial

El título de la nota podría hablar de unas hermanas que viven en la zona de Olivos, al norte de Capital Federal, y que tras matar a alguien deciden darse a la fuga cual Thelma y Louise por todo el territorio de la República Argentina. Pero nada de eso tiene que ver con ellas, Verticillium Dahliae y Xylella Fastidiosa, las verdaderas asesinas.

Julio César De la Puente, pequeño productor de Villa Mazán, localidad del departamento Arauco, en el norte de la provincia de La Rioja, habló con Infocampo y describió la problemática por la que atraviesa la producción de olivos regional, pero que en realidad está poniendo en jaque al mundo olivícola.

En primer lugar De la Puente señaló que “perdimos entre el 25 y el 30% de la cosecha que esperábamos para este año, porque hubo heladas tardías y zonda que afectó mucho al olivo”.

Pero no sólo la situación climática es la que acosa a la producción del olivo, sino que dos enfermedades a nivel mundial están generando un desconcierto en todo el sector, porque no existe (al momento) manera de tratarlas.

“Yo calculo que en cinco años más vamos a tener muy pocos olivos, porque se están secando muchos por la acción del Verticillium Dahliae y Xylella Fastidiosa. No hay nada en concreto para solucionar este problema, ni tampoco veo mucha difusión del Senasa. Los productores de la zona creen que esto se va a curar con el tiempo, pero la realidad es que no tiene cura. Esto va a ser un cementerio de olivos”, indicó el riojano.

España e Italia, principales productores mundiales de oliva, están actualmente reforzando sus investigaciones y protocolos sanitarios para encontrar un procedimiento que detenga a las enfermedades, y para evitar su propagación. En Italia por ejemplo, a la Xylella la llaman “La asesina de Olivos”, y en España le dicen “El Ébola del olivo”.

Al respecto Rafael Jiménez Díaz, quien presidente de la Asociación Española de Sanidad Vegetal, aseguró que el Xylella “destruye el árbol adulto y el jovencito y que el peligro reside en la facilidad de propagación, a través de los insectos que chupan el xilema del árbol y mantienen la bacteria en su aparato bucal”.

El Verticillium Dahliae es un hongo patógeno, mientras que Xylella Fastidiosa es una bacteria fitopatógena.

¿Qué hace el gobierno riojano?

Infocampo entrevistó al gobernador de La Rioja, Sergio Casas, y al ministro de Planeamiento e Industria, Rubén Galleguillo, para saber cómo están manejando el problema de las enfermedades.

“No quiero plantear un conflicto de intereses entre las provincias, pero son enfermedades que vienen de Mendoza, y más allá de todos los estudios científicos que se están llevando a cabo en el plano local e internacional, no se encuentra ni se da en la tecla con la solución”, aseguró el gobernador.

Y continuó: “Mientras investigamos para encontrar la solución, estamos tomando todas las medidas necesarias para evitar más contagios en nuestros olivos”.

Consultado sobre el aporte de Senasa en el problema, Casas indicó que “no, no hay ninguna ayuda de ellos. El gobierno Nacional no apoya en ninguna escala a nuestros productores, ni para el levantamiento de la cosecha. Pero no es algo de La Rioja puntual, sino algo de todos los sectores productivos del país. En la provincia de Catamarca por ejemplo, hay casi 10.000 hectáreas de olivos que se están secando por estas enfermedades”.

Por su parte, Galleguillo explicó que “hemos constituido una comisión que se dedica a estudiar todas las plagas y las enfermedades que afectan a nuestras producciones. En España por ejemplo, la única solución que encontraron por el momento es circunscribir la planta infectada y quemarla; y en Italia están cortando las ramas y los troncos afectados”.

Acá estamos trabajando con diferentes técnicas y esperamos tener buenos resultados en dos o tres meses, para tener ya un protocolo de tratamiento. Este es un tema de alto voltaje y significación, porque cuando la enfermedad llega a un punto crítico es muy difícil detenerla”, finalizó el ministro.

Fuente: Infocampo

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